De esos días..

Hoy es uno de esos días en que te levantas que no sabes ni como estás, si feliz por cosas tristes, o triste por buenas noticias...
La vida a veces cambia en los momentos menos esperados, detalles que marcan la diferencia de la vida, pero solo se quedan en momentos... nada más allá.
Todo lo que un día pensabas que era tu felicidad se esfuma de un plumazo, te da un golpe tan fuerte y repentino que ni siquiera lo ves venir, pero así es.
Las ilusiones se quedan en ilusiones y en sueños que nunca se volverán a cumplir, esas pequeñas cosas que te ayudaban a levantarte cada día y que ahora son como la peor pesadilla.
Personas a las que de verdad quieres y que siempre se quedarán en una ilusión o en una historia nada mas real de lo que fue en un tiempo y no se volverá a repetir. Todos esos sentimientos y efusividad que mostramos durante un tiempo de nuestras vidas que ahora se queda en un al recuerdo que nunca se suele tocar, por si acaso quema..
De repente te levantas en un día estupendo, piensas que te puedes comer el mundo, todo va perfecto, vuelves a recrear la magia una vez más, y con más intensidad que nunca...hasta que al paso de las horas...hay un arrepentimiento horrible, y te das cuenta que lo mejor hubiera sido no dejar aflorar los sentimientos y las pasiones y haber sabido parar a tiempo...pero se es incapaz después de aguantar tanto...y más cuando existen los sentimientos de por medio..
Pero bueno, la vida es así, y las desilusiones están a la orden del día, así que...acostumbremonos, que es lo que nos toca vivir.

UNA BONITA MENTIRA

Hemos vivido una bonita mentira. Tú me regalabas los oídos, mientras yo me perdía en tus palabras. Sabía que lo hacías, pero no me importaba. Decidí vivirlo así e intentar ser feliz de la nada. Y como todo lo que empieza con palabras vacías, terminó siendo una felicidad completamente vacía.
Me decías que eras mio. Cuando escuchas algo así y sabes que no es cierto, que estás compartiendo tu propio corazón, duele. Pero el amor me contaba las mismas mentiras que tú. Me tapaba los ojos con una venda y no me dejaba ver más allá. Si me hubieras leído un cuento, lo habría hecho mío, pensando que algún día se haría realidad. Porque de eso se trató nuestro amor, una preciosa historia en la que, al final, nadie come perdices. Tú las fuiste matando por el camino.
Y para mi desgracia, yo no podía gritar al mundo que re quería, y no supe entenderlo. Porque solo te entendía a ti y a tus malditas mentiras preciosas.
Algún día te darás cuenta de que no me engañaste a mi sólo. Yo te quería. Destrozaste una vida de alguien que estuvo dispuesto a regalarte para siempre...

Porque hasta el más minimo error duele.

Ahora entiendo cuando decían que a veces el amor duele y se transforma en un arma suicida y más de alguno termina muerto, o termina herido y después tiene miedo de volver a amar. Lo que no sabía era que quien estaba apuntando el gatillo hacia mi, eras tú. Y comprendí que el amor no duele, lo que duele son las personas a las cuales decidimos amar, porque hasta el más minimo error duele, duele en la misma proporción en la que se ama. Pero eso es lo que jode, no se elige, simplemente sucede. Pero es bonito mientras dura, ¿o no?. Lo triste es cuando nos vamos convirtiendo en desconocidos con un par de recuerdos que nos hacen sonreír o nos hacen rompernos en la oscuridad ¿como y cuando? ¿como fue que nos convertimos en esto y cuándo dejamos de necesitarnos? Sé que ambos fallamos. Tú por no corresponder al amor que te tenía y yo por vivir una mentira de la cual no quería salir. Nos faltaron un par de cosas por organizar juntos, por ejemplo, nuestro reencuentro en una de las tantas discusiones que tuvimos. Es incierto todo lo que el futuro nos depara, y no sé, quizá en una de esas jugadas nos incluya a nosotros dos.

La lluvia nos moja en distintos lugares

La lluvia nos moja en distintos lugares: a ti en el tuyo, y a mi en el mio. Ya no en el nuestro. Hay cosas que calan profundamente, por ejemplo, tus manos rozando mi cuerpo en ir en busca de lo incierto. Mis pasos, por desgracia son coordenadas a lo insano de imaginarte a ti en un presente donde ya no estás. Hay recuerdos que calan y llegan a dejar aberturas profundas. Y me pregunto: ¿cómo algo que no tiene nada con qué herir deja heridas? Suele ser esa clase de heridas que por las noches se abren un poco más por pensamientos involuntarios, también por tener perspectivas de lo que no pudo ser y no será nunca, no porque no existan las ganas, porque de haberlas, hay demasiadas; sino porque la vida se ha encargado de ponerse en medio de lo que quiero y de lo que no podrá ser jamás. Quiera o no, hay que aceptar el hecho de que algunas personas solo pasan una vez, y aunque reunas todas las fuerzas para ir detrás de ellas, no podrás tenerlas, porque así es un poquito la vida, a veces es tan hija de puta que las esperanzas saltan por la ventana en un suicidio colectivo.

Aqui, o jodes o te joden

Buenas tardes, bienvenidos a la puta realidad. Aquí nunca habrá vuelta atrás. Si te equivocas, no hay forma de retroceder en el tiempo. Ese segundo en el que fallaste, no volverá a surgir. Ni ese minuto, ni ese día, se repetirán.
Aquí, un "game over" no incluye un "reintentar". Aquí, la mayoría de finales no son felices. Aquí, si te arrepientes, no hay un "salir sin guardar".

Y seguimos aquí, demostrando lo fuertes que somos..

Todos necesitamos un hogar donde poder apoyar la cabeza en los momentos difíciles, todos necesitamos a alguien a quien contarle nuestros secretos, todos necesitamos salir a caminar un rato a refrescar nuestros pensamientos, todos necesitamos unas piernas donde llorar nuestras penas y nuestro dolor, todos necesitamos ser amados y ser queridos, todos necesitamos que alguien nos diga palabras bonitas, y no sólo cuando estamos mal; todos necesitamos seguridad en nosotros para poder derribar nuestros miedos, todos necesitamos dejar huella en las personas que pasan por nuestra vida, todos necesitamos sentirnos campeones y no sentir que todo lo que tocamos lo destruimos, todos necesitamos a alguien que se preocupe por nosotros, todos necesitamos a alguien que nos demuestre que moriría por nosotros si es necesario, todos necesitamos a una persona que nos entienda y que en vez de darnos consejos, nos abrace todo el tiempo que sea posible; todos necesitamos sentirnos el todo de alguien más; todos alguna vez hemos fallado y también nos hemos fallado a nosotros mismos, todos alguna vez hemos herido sin querer a alguien que queremos, todos alguna vez nos encerramos en nuestra habitación a vomitar todos los insultos que nos han dicho, todos alguna vez hemos sentido ese sentimiento de acabar con todo, todos alguna vez le hemos dicho algo a alguien que le hizo mucho daño, todos alguna vez hemos llorado porque alguien no nos correspondía en el amor, todos alguna vez hemos reído después de largas horas de llorar, todos alguna vez vimos cómo el tiempo se llevaba a nuestros seres queridos, todos alguna vez hemos tenido insomnio producido por personas que no sienten lo mismo, todos alguna vez nos hemos sentido rotos por dentro, todos alguna vez vimos cómo un día que parecía el mejor, cambio de golpe a peor; todos alguna vez nos hemos enamorado de personas equivocadas, todos alguna vez hemos escuchado una canción y se nos ha venido a la mente un nombre o hemos visualizado a alguien, todos alguna vez nos hemos sentido más muertos que vivos, una especie de zombi; todos alguna vez nos perdimos y no supimos qué queríamos ni qué sentíamos, todos alguna vez hemos tomado decisiones equivocadas, todos alguna vez le hicimos caso a la mente, en vez de hacerle caso al corazón; todos alguna vez dejamos ir trenes por esperar a personas que nunca llegaron, todos alguna vez no supimos quién éramos, todos alguna vez hemos besado sin sentir nada, como también hemos dicho adiós a personas que nos hacían sentir guerras por dentro; todos alguna vez vimos cómo una persona brilló más que cualquier estrella, todos alguna vez fuimos víctimas del destino, todos alguna vez hemos sentido no encajar, todos alguna vez nos hemos sentido ausentes con miles de personas a nuestro alrededor. Y seguimos aquí, demostrando lo fuertes que somos.

El único recuerdo

He conocido a mucha gente, por desgracia, ninguno se parece en lo más mínimo a ti. He intentado buscarte en otras personas, en otros labios, en otras miradas, en otros lugares; pero no logro encontrarte. Me he refugiado en nuevos sentimientos, aunque por dentro esté un poco muerta. Los amaneceres sólo me recuerdan algo: que no estás aquí. El tiempo pasa demasiado rápido y yo todavía te espero, aunque de distinta forma: ya no espero a que vengas. Espero que nunca sepas la diferencia entre una cosa y la otra. Yo contigo he roto cualquier rutina, cualquier cosa "normal" , cualquier sonrisa triste, cualquier raíz que me ata a otras circunstancias, a otros momentos. Con los años me he dado cuenta de que el tiempo no cura nada, sólo te aumenta el deseo de querer que ocurran de nuevo algunas personas, pero en el fondo quiero que duelas siempre, y no es por masoquismo, es porque alguna gente tiene que doler lo suficiente como para que algún día sea aquel recuerdo que, cuando necesitas a alguien, esté aún latiendo. No olvidemos que el dolor es, en ocasiones, el único recuerdo.